Hace unos días el secretario autonómico de FSIE dirigía una
carta a la Comisión de Escolarización de Badajoz, donde vilipendiaba al
Sindicato PIDE. Un texto lamentable y patético por la carga de
ignorancia que contiene, amén de insultos y ofensas a PIDE, impropio de
un Secretario de una organización, para después hablar de dignidad...
Precisamente esas injurias y mentiras que vierte sobre el Sindicato
mayoritario de la Educación Pública es lo que le deja en evidencia de
forma notable.
Sostiene este señor que PIDE utilizaba todos los foros para
atacar a la enseñanza concertada, cuando lo que hacemos es utilizarlos
para defender la educación pública, esa que a su sindicato le importa
poco. No defendemos la Educación Pública por inquina a la concertada,
como dice, sino porque La Pública es la única que debe ser sostenida con
fondos públicos, la privada deber ser sufragada con dinero privado: el
de los padres y madres que eligen esa educación.
Añade, por supina ignorancia, que PIDE se ha instalado en el
mundo sindical no hace mucho, cuando este año cumplimos nuestro 25
aniversario. Y que nos damos notoriedad, igual se refiere a los logros
de PIDE para la mejora de las condiciones laborales de los docentes de La
Pública y a haber ganado las últimas elecciones sindicales docentes en
Extremadura... En eso estaríamos de acuerdo.
Aprovecha la carta referida para hablar de ideología, y ahí,
claro, se mete en un jardín... Es claro que FSIE es un sindicato
profundamente ideologizado y subvencionado, pero tampoco tengo interés
en desenmascararlos, sobre todo porque no hace falta, es del común
conocimiento qué ideología política los sostiene. PIDE tiene una
ideología educativa. Lo que este señor no sabe (y cuando se entere igual
entra en trance... ) es que los delegados de PIDE, en sus asambleas, no
hablan ni una palabra de política ¡no nos interesa! Por eso,
ideológicamente somos un sindicato transversal. Igual su sindicato
debería probarlo, es liberador...
Dice, el infortunado, que queremos extinguir un sector de la educación,
supongo que se refiere a la concertada, para beneficiar a la pública. Y
eso lo dice con un cinismo sin tapujos, dado que su sindicato calló (y
probablemente aplaudió) cuando, al producirse la fusión de dos IES
públicos de Llerena, para proteger el centro concertado de la localidad,
mandó a la calle a 20 profesores de la Educación Pública. O cuando se
cerró el CEIP Juan XXIII de Mérida, protegiendo con ello los tres
centros privado-concertados colindantes. O cuando cerraron el CEIP El
Cristo de Villanueva de la Serena, sin tocar los centros concertados de
la localidad.
Miente el Sr. Secretario de FSIE diciendo que PIDE odia a los
centros concertados y desprecia a sus trabajadores. Defender los
intereses de la educación pública no es odiar a nadie. Intentar crear
animadversión contra PIDE con embustes no creo que sea digno de un
cargo sindical como el que este señor ostenta. Ataca además a los
profesores de la Educación Pública diciendo que estos disfrutan del
“protector manto de la oposición”. Ya la cosa pinta preocupante, parece
haber perdido el oremus... A ver, señor secretario de FSIE, la oposición
docente respeta los principios constitucionales de igualdad, mérito y
capacidad. ¿Los docentes de la privada-concertada se eligen con estos
principios? Es una pregunta retórica, todos sabemos cuál es el manto que
protege a los docentes de la concertada...
Nos acusa de desear la desaparición de la red concertada, habla
de la libertad de elección de centros y, -añade-, para rematar su
ataque, que los conciertos fueron una decisión política acertada.
Veamos. En Extremadura, a día de hoy, la red de centros públicos
es suficiente para absorber la demanda de escolarización, porque hay
más plazas públicas que alumnos escolarizables. Es así de simple y esta
es una realidad estadística, son datos que no hemos inventado. Los
conciertos nacieron, allá por los años 80, para escolarizar a los
alumnos que no podían ser escolarizados en la escuela pública, porque el
auge de escolarización de aquellos años excedía la capacidad de la
Escuela Pública y esto era así porque no se construyeron los miles de
centros públicos que sí hubiera sido posible edificar si la dictadura no
hubiera supuesto un parón de 40 años en la evolución de la sociedad.
La decisión que fue, efectivamente, política llevaba consigo un
compromiso (también político) que nunca llegó a cumplirse.Y este era que
a medida que se fuesen construyendo centros públicos, se irían
retirando los conciertos.
En cuanto a la libre elección de centros, esta hay que hacerla
entre centros públicos y privados, que es a lo que realmente se refiere
la Constitución, porque cuando la Constitución se redactó, en 1978, no
existían los centros concertados.
El secretario de FSIE dice que sus centros están inspeccionados
como los demás, por eso, -supongo-, hay centros concertados con ratios
autorizadas de incluso 3 alumnos, cuando en la pública se suprimen
unidades basadas en una estricta vigilancia de las ratios. Eso al
dirigente de FSIE no le preocupa, tampoco yo voy a echárselo en cara, ni
le voy a decir que alienta con su posición la expulsión de sus puestos
de infinidad de profesores y maestros de la Escuela Pública.
Termina su exposición llena de falsedades e insultos diciendo
que PIDE considera a los profesores de la privada-concertada
trabajadores de segunda. En absoluto es así ¡miente!
PIDE defenderá
siempre la iniciativa privada, nos parece bien la educación privada y
sus docentes tendrán la titulación que avala sus conocimientos, eso no
lo dudamos... Otra cosa es subvencionar con dinero público negocios
privados, que es la definición exacta de la educación concertada.Y
estamos totalmente en contra de eso...
Debo reconocer que este señor, el secretario de FSIE, hace su trabajo,
defiende lo que le interesa defender y llega a causar cierta ternura la
candidez de sus argumentos, aderezada por la ignorancia manifiesta que
los alimenta. PIDE va más allá, defiende uno de los pilares básicos
donde la sociedad se asienta: la Educación Pública, que se erige en un
sector clave para el crecimiento de una sociedad democrática, para
garantizar la igualdad de oportunidades y la cohesión social.
Siga usted
cargando sus tintas contra PIDE. Nosotros seguiremos a lo nuestro,
defendiendo con uñas y dientes la Educación Pública, no entendemos
nuestro existir sin este fin y cada día lo haremos con más fuerza. No le
quepa duda...